No puedo dejar de serte sincera... Y te diré la verdad, incluída ésta vez.

No puedo dejar de pensar en ti, pero tengo miedo. Tengo tantas ganas como miedo...

Tengo tantas ganas de estar cerca de ti, de sentirte, de hacerte saber lo que siento por ti, de que me hagas saber lo que sientes por mi, de pasar frío a tu lado y que me abraces, que me pases  tu mano protegiéndome de las fuerzas de la naturaleza. Tengo ganas de tener esas conversaciones contigo, de mirarte, de que me mires, y de que me digas lo mucho que me amas , de que respires mi aroma y de que yo pueda drogarme con tu esencia. Tengo ganas de estar contigo, tengo ganas de no tener que separarme de ti.